❤️Si hay algo que me apasionaba, era ir a la escuela.(Escuela Antonio Torres).
Año1959,SanJuan, mi barrio pobre,mis amigos.
No sé porqué, pero entre mis amigos, había solamente una niña, mi querida Susy.
Mi madre me había vestido cómo una princesita, cómo lo hacía siempre.
El delantal era blanco con tablitas, prolijamente planchadas y el detalle de las manos de mi madre, concluía con un moño muy bien hecho,que marcaba la cintura en la parte de atrás.
Zapatos bien lustrados y medias blancas.
Ella me hacía diferentes peinados: trencitas, media cola, o cola tomando el cabello con una cinta blanca.
A mi casa llegaron mis amigos y partimos juntos, a tomar el colectivo.
Mamá había puesto en mis manos, un ramito de bonitas flores, para la maestra.
Jamás olvidé a aquellos niños, que nos acompañaban cada mañana, hasta nuestra escuela y luego nos esperaban a la salida ( ellos iban a otra escuela).
Aldo, Roberto, Tito, Susana y yo , íbamos muy felices....de pronto sucedió algo inesperado y se borró la risa de los chicos.
Muy bonita, iba yo....toda blanca como una paloma.
Inesperadamente tropecé y caí, aterrizando con las manos.
Mis manos terminaron, al igual que mis rodillas, con piedrecitas incrustadas.
Voló el ramito de flores, junto con la maleta.
El delantal perdió su color blanco, y los zapatitos,quedaron raspados en las punteras.
Y por supuesto, la princesa, comenzó a llorar de dolor, pero mucho más de vergüenza.
Pero mis amigos, cómo eran amigos de verdad, me acompañaron de regreso a mi casa.
Por supuesto mi madre,se sorprendió y luego sonrió.
Su abrazo, me dió el consuelo que necesitaba.
Ese día lunes, tuve que faltar a la escuela.
Susana, Aldo, Tito y Roberto llegaron un poco tarde.
Al recordar esta historia, me emocioné muchísimo.
Cómo me gustaría repetir ese momento ❤️*.
Esilda Serignani.
Derechos reservados del autor.
Imagen : foto personal, junto a mis padres.